Lunes 5 de diciembre de 2022
¡Buenos días! Ayer celebramos el segundo domingo de Adviento. En el evangelio de ayer se nos habla de cómo Juan prepara a todos para el nacimiento de Jesús.
Proponemos hoy, como oración de
esta mañana, una lectura adaptada del evangelio del ayer. También lo podemos
ver a través del siguiente enlace:
LECTURA: JUAN
EL BAUTISTA - ¿cf Mt. 3, 1-12)
Juan Bautista era el primo de Jesús. Se fue al desierto, y le
decía a la gente: “Tenéis que cambiar, porque está cerca el reino de Dios”. Y
recordaba las palabras del profeta Isaías: “Preparad el camino del Señor,
allanad sus caminos”. Juan llevaba un vestido de piel de camello, con un
cinturón de cuero. Comía saltamontes y miel. Y mucha gente acudía a él.
Confesaban sus pecados, y él los bautizaba. Juan criticaba a los que venían sin
convertirse. Les llamaba víboras. Y les decía que si no se convertían no
serviría de nada el bautismo. También anunciaba: “Detrás de mí viene uno más
poderoso que yo. Yo os bautizo con agua, pero él os bautizará con el Espíritu
santo y fuego”. Se refería a Jesús.
REFLEXIÓN
El
mismo Juan Bautista que invitaba a todos a preparar el corazón para acoger a
Dios, les decía a algunos cómo debían comportarse en situaciones concretas:
Compartid de lo que tenéis con quien no tiene y necesita. No hagáis daño ni os
aprovechéis de los sencillos y de los indefensos.
Después
de escuchar este evangelio podemos preguntar a Jesús: ¿Cómo podemos preparar el
corazón de modo que te acojamos cuando nazcas de nuevo en la próxima Navidad?
Pedimos
a nuestra madre, María que nos ayude a preparar el corazón… y rezamos juntos.
DIOS TE SALVE, MARÍA…