Lunes 9 de enero de 2023

 ¡Feliz Año Nuevo! Bienvenidos de nuevo al colegio. Después de celebrar con alegría el nacimiento de Jesús junto a nuestros familiares, regresamos al colegio. Queremos seguir creciendo como personas y como amigos de Dios, construyendo nuestra vida junto a las demás personas.

Hace tres días, celebrábamos el día de los Reyes. En ese día no solo son importantes los regalos… Celebramos que Jesús es alguien importante para todos -también para los de muy lejos como los sabios de Oriente- y no sólo para algunos pocos como creían los judíos. A veces, muchos que vienen de lejos nos dan lecciones a los de cerca. Ellos sí que encontraron en Jesús al rey que buscaban. ¡Felices y afortunados! Vamos a comenzar el año con el evangelio de ese día.

 Adoración de los Magos - Mateo 2, 1-12

Cuando Jesús nació en Belén, unos magos de oriente llegaron a la capital, Jerusalén, y preguntaban:

«¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto salir su estrella, y nos ha guiado hasta aquí».

Ellos se referían a Jesús, claro, pero a Herodes, que era el rey de entonces, le molestó mucho que pudiera haber otro rey. Pero, para que no se le notase el enfado, les dijo a los magos que siguieran adelante, y si se enteraban de algo, que le avisaran, para ir él también a ver a ese rey de los judíos. La verdad es que Herodes solo quería saberlo para acabar con él.

Los magos siguieron su camino, y la estrella les llevó hasta Belén. Allí, en un establo, encontraron a María y José, y al niño en un pesebre. Inmediatamente se dieron cuenta de que ese niño era especial, se pusieron de rodillas y le ofrecieron lo que traían, que eran los regalos que se hacen a los reyes: oro, incienso y mirra. Después se echaron a dormir. Dios, en sueños, les dijo que ni se les ocurriera volver a donde Herodes, así que ellos se marcharon por otro camino a su casa.

  


REFLEXIÓN:

- Lo más importante es que venidos desde cerca y desde lejos, todos quieren encontrarse con Jesús.

- En cuanto lo vieron, los magos descubrieron que el niño era especial y le dieron los regalos que se suelen hacer a los reyes (oro, incienso y mirra). Sintieron que Jesús era alguien a quien debían conocer. Por eso preguntaron por Él.

- Imaginamos cómo sería esa visita… Los tres reyes caminando durante días y siguiendo una estrella. A nosotros también en todo lo que hacemos Jesús nos cuida, nos guía y está deseando que le visitemos.

- Hoy nos acordamos de nuestros regalos de reyes, pero también de Jesús y de todos los niños del mundo.

 

Terminamos este momento de oración rezando juntos PADRENUESTRO…