Lunes, 4 de diciembre de 2023
¡Buenos días! Antes de comenzar la
oración de la mañana, es buen momento para situarse en el medidor emocional...
¿Cómo te sientes hoy?
Ayer
comenzamos un tiempo nuevo: ADVIENTO. Siempre que nos vamos de viaje, dedicamos
un tiempo a prepararlo… Las maletas, dónde ir… Si queremos que algo nos salga
bien, lo preparamos con antelación. Este tiempo de adviento que empezamos ayer,
trata de eso, de preparar nuestro corazón para la venida de Jesús.
Proponemos
hoy, como oración de esta mañana, una lectura adaptada del evangelio de ayer,
primer domingo de adviento. Antes de escuchar la lectura, respiramos hondo tres
veces, muy despacio, y prestamos atención. También lo podemos ver a través del
siguiente enlace:
LECTURA: VELAD, PUES NO SABÉIS CUANDO VENDRÁ (cf. Mc 13, 33-37)
Jesús estaba
con sus discípulos y les dijo: tenéis que estar atentos. Porque si andáis
distraídos, ocupados en mil cosas, no os daréis cuenta de cuándo Dios pasa a
vuestro lado. Es como si un amigo al que no ves desde hace mucho te dice que va
a pasar a verte, pero que estés atento, porque no puede quedarse mucho tiempo.
Y en lugar de atender, tú te despistas, y no oyes cuándo llama a la puerta,
aunque llama muchas veces insistiendo. Tu amigo se tiene que ir. Y aunque
tenías ganas de verle, al final no os encontráis. Eso os digo yo a vosotros:
‘estad atentos’.
REFLEXIÓN
- Jesús nos
pide que estemos atentos… que preparemos su venida.
- ¿Cómo? ¿Qué
podemos hacer para estar más atentos? Cumpliendo cada uno con nuestra tarea lo
mejor posible, así estaremos preparados para acoger a quien nos necesite.
- Podemos
preparar en casa un pequeño calendario de adviento, poniendo cada día una
actitud que nos enseña Jesús y con la que podemos preparar mejor su venida.
Terminamos este momento de oración
rezando a la Virgen María… DIOS TE SALVE, MARÍA…