Viernes 24 de enero de 2025
¡Buenos días! Comenzamos la mañana en el Nombre del Padre y el Hijo y del Espíritu Santo. Hoy proponemos comenzar con la siguiente relajación. Se trata de un breve instante para, después, en el momento de la oración, mantener nuestra atención plenamente…
Esta semana proponemos un momento de relajación, mientras escuchamos una música tranquila:
Cerramos los ojos y respiramos profundamente… Sentimos cómo entra el aire
al inspirar y como sale al espirar… Siéntate con la espalda recta, las piernas
paralelas y los pies en el suelo. Extiende las manos sobre tus rodillas. Cierra
muy fuerte las manos y mantenlas así durante 10 segundos. Uno, dos, tres…
(contamos lentamente). Después relaja ambas manos suavemente. Respira hondo…
Vuelve a repetir este ejercicio tres veces (esperamos unos instantes entre este
y el siguiente ejercicio).
Encoge los hombros hasta las orejas y libéralos poco a poco. Repítelo
lentamente varias veces… Inspira profundamente y expira muy despacio.
Después seguimos unos instantes tranquilos mientras escuchamos la música…
abrimos los ojos, y estiramos nuestros brazos. Finalmente, se les preguntará
cómo se han sentido.
REFLEXIÓN:
- ¿En qué podemos reconocer que
Dios nos ama? Lo pensamos, con los ojos cerrados unos instantes, después de
escuchar la canción.
Gracias, Señor, porque todo,
es una oportunidad que me das
para vivir poniendo yo también,
y sintiendo tu amor.
Padrenuestro…