Lunes 10 de febrero de 2025
¡Buenos días! Antes de comenzar la
oración de la mañana, es buen momento para situarse en el medidor emocional...
¿Cómo te sientes hoy?
En el caso de no poder acceder a él se puede leer la siguiente adaptación de la lectura:
Pesca milagrosa - Lucas 5, 1-11
En
aquel tiempo, la gente se agolpaba alrededor de Jesús para oír la palabra de
Dios, estando él a orillas del lago de Genesaret; y vio dos barcas que estaban
junto a la orilla: los pescadores habían desembarcado y estaban lavando las
redes. Subió a una de las barcas, la de Simón, y le pidió que la apartara un
poco de tierra. Desde la barca, sentado, enseñaba a la gente. Cuando acabó de
hablar, dijo a Simón: -Rema mar adentro y echad las redes para pescar. Simón
contestó: -Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada;
pero, por tu palabra, echaré las redes. Y puestos a la obra, hicieron una
redada de peces tan grande, que reventaba la red. Hicieron señas a los socios
de la otra barca, para que vinieran a echarles una mano. Se acercaron ellos y
llenaron las dos barcas, que casi se hundían. Jesús dijo a Simón: -No temas;
desde ahora serás pescador de hombres. Ellos sacaron las barcas a tierra y,
dejándolo todo, lo siguieron.
REFLEXIÓN
-
Jesús nos pide que pase lo que pase no nos rindamos, aunque, a veces, no den
resultado nuestros esfuerzos a la primera. Hay que ser constantes y confiados.
-
Si le escuchamos y aprendemos de él, seguro que nuestra vida dará buenos
frutos. Todo lo que realicemos debemos hacerlo con una confianza muy grande en
su Palabra.
- Y después, todos juntos, tras
ver el vídeo o haber escuchado la lectura evangélica, recitamos la siguiente
oración… Si no podemos recitarla juntos, vamos leyendo cada frase y les pedimos
que la repitan.
Jesús, ven, entra, sube a la barca de mi vida.
Quiero escucharte, navegar contigo.
Siempre estás con nosotros, nos animas,
transformas nuestras penas en gozo.