Viernes 14 de febrero de 2025
¡Buenos días! Comenzamos la mañana en el Nombre del Padre y el Hijo y del Espíritu Santo. Pensamos que Dios está aquí en medio de nosotros, nos ve, nos oye, nos ama nos conoce por nuestro nombre. Como cada viernes, nos relajamos para poner toda nuestra atención en la oración que haremos después.
Podemos poner música tranquila de fondo:
Nos sentamos
buscando una postura cómoda… Cerramos los ojos y respiramos despacio, con
calma… Escuchamos tranquilos la música…
Respiramos profundamente y muy despacio… Cogemos aire por la nariz… lo
mantenemos un instante… lo soltamos lentamente por la boca. Imagina que estás
paseando por un prado… Puedes ver el suelo, lleno de hierba… Notas lo blando
que es… Te sientes cómodo caminando sobre esa hierba… En medio del prado hay un
árbol muy grande, con muchas hojas… Tiene el tronco grueso y muchas ramas… Sus
hojas son verdes… Mira a ver si ves sus frutos…
Ahora
descubres que hay un pequeño caracol sobre una piedra en el suelo… Tiene la
concha rayada… Su cuerpo es blando, marrón y tiene unos pequeños cuernecitos…
Está muy tranquilo comiendo… Vuelve a disfrutar plácidamente del paisaje…
Respira tranquilo un minuto más… Lentamente abrimos los ojos y estiramos hacia
adelante los brazos juntando las manos…
La oración de hoy va a
centrarse en la canción “Solidaridad” (en el siguiente enlace aparece con la
letra, para que se pueda cantar mientras se escucha)
Compartimos con los demás, después
de escuchar la canción, qué es para nosotros la solidaridad y si alguien
recuerda qué nos dice Jesús en el evangelio sobre compartir. Terminamos haciendo la
siguiente oración. Una persona lee la oración y nos unimos todos repitiendo la frase en
mayúsculas… Rezamos juntos Padrenuestro…
JESÚS, ENSÉÑANOS A COMPARTIR CON LOS DEMÁS
Jesús,
Siempre te vemos
rodeado de muchas personas.
Todos querían estar contigo
porque les ayudabas y les
cuidabas.
JESÚS, ENSÉÑANOS A COMPARTIR CON LOS DEMÁS
Cuando
te diste cuenta
de que había gente con hambre,
pediste a todos que compartieran
lo que tenían,
y así nadie se quedó sin comer.
JESÚS, ENSÉÑANOS A COMPARTIR CON LOS DEMÁS
Jesús, tú nos enseñas
que si compartimos el pan
y las cosas buenas que tenemos,
el mundo será mejor
y no habrá personas con hambre.
JESÚS, ENSÉÑANOS A COMPARTIR CON LOS DEMÁS
Ayúdanos a no ser egoístas
y a pensar en quienes necesitan
nuestra ayuda.