Lunes 24 de marzo de 2025

 ¡Buenos días! Antes de comenzar la oración de la mañana, es buen momento para situarse en el medidor emocional... ¿Cómo te sientes hoy?

 

¡Buenos días! En la oración de esta mañana vamos a utilizar el evangelio de ayer domingo, la parábola de la higuera. Una parábola es un regalo que nos da Jesús, para ayudarnos a descubrir un poco mejor su mensaje de amor.

 

Un hombre tenía una higuera plantada en su viña (la higuera es un árbol que da higos, que es un fruto muy rico). Pues ese hombre fue a buscar los frutos de su higuera, y no había dado ni uno. Se enfadó tanto que le dijo a un viñador que trabajaba para él: "Hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo encuentro. Córtala. ¿Para qué va a ocupar terreno?” Pero el viñador contestó: "Señor, déjala todavía este año; yo cavaré alrededor y le echaré estiércol, a ver si da fruto. Y si no da fruto, entonces la cortas". Jesús quería que entendieran que Dios es como ese campesino que trabaja en la viña, que siempre intenta darnos otra oportunidad.

 

REFLEXIÓN:

- La higuera debía llevar varios años plantada. Como no ha dado fruto, debe ser cortada, pues ocupa terreno y está absorbiendo los nutrientes de la tierra inútilmente. Sin embargo, el viñador propone hacer algo excepcional. Quiere conservar la higuera y hará hasta su último esfuerzo por que dé fruto.

Terminamos con esta pequeña reflexión:

 

¿Quién crees que plantó la higuera?  Tal vez sea Dios.

¿Quién crees que sea la higuera? Tal vez somos nosotros

¿Quién crees que sea el viñador? Jesús Porque, aunque Dios ha esperado pacientemente que seamos buenos, Tú vienes a hablarnos y a darnos todo tu amor y tu cuidado, para que cambiemos y demos buenos frutos. Padrenuestro…